Siendo una de las bebidas más populares, el café atrae a cada vez más adeptos no solo por su sabor, sino también por sus múltiples propiedades organolépticas y otros beneficios que produce en nuestro organismo.
¿Para qué es bueno el café?
El café aporta a nuestro organismo una gran cantidad de beneficios. Dentro de estos, podemos encontrar:
- Función quemagrasas: el café es un acelerador natural del metabolismo y es de las pocas sustancias naturales que ayudan a quemar grasa porque hace aumentar los niveles de adrenalina en el cuerpo liberando ácidos grasos
- Fuente de antioxidantes: los antioxidantes nos ayudan a retrasar los efectos del envejecimiento y prevén diversas enfermedades
- Protección para el corazón y el hígado: el café ayuda a combatir enfermedades crónicas y degenerativas relacionadas con el corazón y el hígado
- Aporta nutrientes: en una taza de café podemos encontrar una rica fuente de minerales y vitaminas
¿Cómo se hace el café?
Para hacer un buen café en cafetera italiana, se necesita contar con café de calidad. Lo más recomendable es que sea en grano y se muela lo necesario en el momento de la preparación, aunque también hay buenas opciones con café ya molido. A continuación, llenamos el depósito de agua de la cafetera hasta debajo de la válvula y echamos el café en el embudo, situado en la parte superior con precaución de no aplastarlo.
Una vez cerrada, pondremos la cafetera en el fuego y llevaremos el agua a ebullición hasta que veamos que comienza a salir café y la retiremos del fuego.
¿Qué tipos de café existen según su preparación?
El café se puede tomar de diferentes formas dependiendo de cómo lo preparemos, si bien las más populares son:
- Café solo o expreso: se trata únicamente de una infusión de café que se ha conseguido colocando el café molido en contacto con el agua caliente.
- Café cortado: es la mezcla de un café solo al que se le añade un poco de leche. También se conoce como macchiato porque “mancha” o tiñe el café.
- Café latte o café con leche: con una proporción de 1/3 de café más 2/3 de leche, el café con leche es una de las fórmulas más populares. Se consigue un sabor menos intenso y más dulce que con los anteriores.
- Café americano: este tipo de café es similar al café expreso, pero al que se le añade una cantidad mayor de agua. Se obtiene un café menos potente y más aguado que en su versión original.
- Café capuchino: el café capuchino consiste en una combinación de café expreso, leche vaporizada y espuma de leche a partes iguales. Además, suele añadírsele un poco de cacao espolvoreado por encima.
- Café bombón: esta variante del café con leche consiste en intercambiar la leche por leche condensada. El resultado es muy dulce.
- Café mocca: el café mocca consiste en un café latte al que se le añade chocolate o cacao en forma de sirope o polvo.
¿Cuáles son las variedades de café?
Aunque existen multitud de variedades de café, las más populares son el café arábica o arábigo, y el café robusta. El café arábica, que representa casi el 80% de la producción mundial, tiene un sabor suave y agradable al paladar.
En cambio, el café robusta presenta una mayor concentración de cafeína que el anterior. Su sabor es fuerte y amargo, con un olor menos perfumado y una textura áspera que recuerda a los frutos secos y la madera.
Mientras que el café robusta se utiliza para blends (mezclas), el café arábica se prefiere en cafés más gourmets.
¿Qué es el café arábica?
El café arábica es considerado un café de tipo gourmet debido a su delicioso sabor. Es equilibrado, tiene buen aroma y presenta una acidez suave y agradable al probarlo.
¿Qué es el café de especialidad?
El café de especialidad destaca por su aroma, sabor, personalidad y carácter distintivo. Es un café calificado con 80 puntos o más dentro de una escala de 100. Se deben de utilizar granos de café de la variedad arábica, recolectarse a mano y ser seleccionados de la misma manera, además de conseguir un punto de tueste exacto y conseguir el mejor sabor.